Adolf Kaufmann nació de un padre alemán y una madre japonesa. Como resultado de ser de sangre mezclada, Adolf luchó con su identidad y se obsesionó con la raza. En su juventud se hizo buen amigo de un niño judío Adolf Kamil. Finalmente, Adolf Kaufmann fue enviado a Alemania para unirse a la Juventud Hitleriana. Allí le enseñaron a odiar al pueblo judío, aunque le fue difícil aceptar la opinión de los nazis sobre el pueblo judío debido a su amistad con Adolf Kamil.