Descrito como un hombre que rara vez abandona el campo de batalla, el general Budou es un hombre endurecido, con años de entrenamiento y dificultades militares que lo configuran a su estado actual. Como general nacido de un célebre linaje, Budou se enorgullece de su honor y del imperio. A diferencia de la mayoría de los generales, no se afilia al Primer Ministro, y el general detesta al cerdo. Incluso llegó a afirmar que una vez que los rebeldes fueran aplastados, aquellos que causaron el caos en el país incurrirían en su ira. Su teigu se llama "Adrammelech", pero sus habilidades son desconocidas.