Ladrona y hechicera de la cresta, pasa su tiempo con Mirabelle y Jerusha robando a los ricos y cazando tesoros. Para su disgusto, con frecuencia se encuentran con el grupo Sheyennes y, como resultado, a menudo pierden el tesoro. Tanto es así que tanto Loretta como Mirabelle llamaron a Sheyenne como el "Dios de la pobreza" y decidieron huir la próxima vez que lo vean. Loretta es consciente de su propia belleza, y una de sus tácticas más comunes es usar su cuerpo para distraer a las víctimas desprevenidas antes de robarlas. Sin embargo, no carece de habilidades, como se muestra en el episodio 9, "La esclava del juego", donde se convierte en la mejor luchadora femenina. Ella es una hechicera de cresta competente, pero está limitada por su obsesión con el valor monetario de la cresta. Como ladrona y cazadora de tesoros, Loretta es propensa a hacer casi cualquier cosa para llegar a los objetos de valor, incluso fingir ser una heredera perdida hace mucho tiempo y unirse a una pandilla de robos de mujeres. Sin embargo, ella ha demostrado adherirse a un código moral cuando se trata de obtener crestas, y está visiblemente indignada cuando alguien lo ha roto.