El escritor de misterios Mikazuki Subaru, que no es bueno para tratar con personas, considera que son una molestia a la hora de construir su mundo imaginario. Un día, se topa con un gato callejero y siente que la inspiración golpea, por lo que lleva al gato a casa como su musa. ¿Puede ver los comportamientos inexplicables de un gato formar material para una novela? (Fuente: MU)