Choko comienza a tener una relación de amigos y beneficios con su enamorado de la escuela secundaria Kazuki. Ahora tiene 36 años, se divorció dos veces y tiene una hija adolescente que cría sola. Kazuki trabaja como médico en una clínica de mujeres y tampoco quiere casarse o tener una relación más profunda. Acuerdan dormir entre ellos cuando uno de ellos quiere hacerlo. Pero, por supuesto, todavía hay sentimientos y otros dramas que intentan romper esta promesa.