Rina estaba trabajando para una agencia de viajes donde estaba a cargo de la gira "Onihime-mairi". Ella estaría mostrando el pueblo de Matsusawa, famoso por sus leyendas espirituales. Las parejas y grupos amantes del horror participarían en un día espeluznante, y parecía ser un nuevo comienzo para Rina. Sin embargo, esta gira fue planeada por los participantes de la gira. En un pueblo solitario en las montañas, las chicas serían llevadas a nuevas alturas por los deseos sexuales de los hombres de su grupo. Poco sabía ella que los espíritus los controlaban a todos.