Durante las vacaciones de verano, Tetsuo le pide a Sakie que se una a él en el servicio de patrullaje para el festival local de verano, al que van tanto la desamparada como Himari y sus amigos. Mientras cada grupo decide visitar un santuario cercano, se asustan por algunos sucesos extraños, que resultan ser el uno del otro. Cuando comienza el próximo semestre, Tetsuo conversa con una mujer invisible llamada Matsuri.